¿No había una programa de tele que se llamaba así?

¡¡¡VAYA SEMANITA!!!

No se porqué pusieron este nombre al programa, pero mi semana se puede resumir con esta breve frase entre admiraciones.

Globalmente no ha sido ni muy buena ni muy mala (desde hace algún tiempo nada es lo suficientemente malo para estropear un día por completo), pero esta semana han habido algunos acontecimientos, agrupados por fechas, que tela...

Golpe con el coche, multa de la poli, y quedarme fuera de casa sin poder pasar durante toda la mañana.

Y todo por mi mala cabeza -que dirían los castizos-,vamos por partes:

Llego un día típico de stress a presentar los papeles a Hacienda (buen comienzo) del resumen anual de iva y etcs que os podáis imaginar, y como era el último día hábil para hacerlo, y como a todos nos pasa lo mismo, pues estaba la calle petá de coches, así que no se me ocurre más que dejar el coche aparcado encima de la acera (dos ruedas encima y dos en la calzada), y corriendo paso a las oficinas a solucionar cuanto antes todo este marrón de papeles para poder continuar con una reunión para la cual contaba con 45 min. antes de ir a recoger a la guarde al niño.
Yo dentro de las oficinas, ahí esperando paciente en una cola..., y una chica que va cola por cola diciendo algo, buscando a alguien. llega a mi cola y pregunta, ¿un coche tal, color tal...? ...y yo pensando el mío es igual...
"YO YO! es mío!"
"Pues está en mitad de la calle, no tenía el freno de mano puesto y se ha ido solo contra un coche y está formando un tapón en la calle, bla bla bla bla..." (ya no oí más, me fui corriendo para la calle...) y efectivamente, me había dejado el coche sin el freno de mano, y como estaba mal colocado, pues fue él solito y se movió hacia otro coche estacionado enfrente, y se quedó en mitad de la calle ante el asombro de conductores y caminantes varios. Qué faena! parte del seguro, etc.
Pues como no había solucionado los trámites para los que había ido a nuestra querida Hacienda Pública, vuelvo a entrar para acabar de rematar la faena, y cual es mi agradable sorpresa cuando salgo , que me había puesto una multa la poli por estar mal estacionada (...la luz en mí...).

Ese día ni reunión ni leches.

Pero es que otro día de esta semana, salgo de casa, cierro la puerta, y me doy cuenta -una vez cerrada, claro- de que un juego de llaves está puesto en la cerradura interior. Llama al cerrajero, los vecinos -más majos-, ayudando con una radiografía,... y al final, gracias a los obreros de un edificio cercano en construcción, escalera arriba, se colaron por el balcón y abrieron la puerta.

Todo tiene arreglo, más o menos, nada es grave,...pero VAYA SEMANITA!!

Nota. Encima este fin de semana me desplazo para los carnavales mundialmente conocidos de Villarrobledo aprovechando el buen tiempo reinante en toda la península, y hace un tiempo horroroso...frío, lluvia...

Por Tutatis, que se acabe!!
Bs